Autor:

José Antonio Navarro Gisbert

El Congreso en llamas

por José Antonio Navarro Gisbert

Aunque carecía de soporte documental que lo acreditara, Juan Pérez, a falta de otro título, declaraba a quien quisiera oírle, ser el español 4.000.001 en paro forzoso. Aquella mañana de febrero, gélida como el augurio de su futuro, después de cobrar los cuatrocientos euros con que la generosidad gubernamental retribuía a la famélica legión en ciernes, lejos de hundirse en la depresión, sintiéndose contagiado de optimismo antropológico, palpó literalmente la fresca paga y farfulló un comentario acerca de su situación: «Madrid—se dijo— es pueblo demasiado grande para tan poco dinero. Tanto da este capital como ninguno.»

El "Guernica" de Picasso: ¿un viajero perenne?

por José Antonio Navarro Gisbert

Aunque todo indica que el "Guernica" de Picasso vaya quedar, o debe quedar, exhibido en el Reina Sofía, una tormenta en vaso de agua ha amenazado con desatarse para resolver si debe quedar donde está o pasar a El Prado o al museo del Ejército. En defensa de su ubicación actual, el director del Reina Sofía, Manuel Borja Villet, sostiene el argumento de que la salud del cuadro es frágil y los expertos recomiendan que no vuelva a salir de las salas del museo. Aducen, además, que forma parte de la identidad del mismo, y que no debe correr el riesgo de volver a exponerse a ningún tipo de movimiento o traslado. A menos que un destino inescrutable asigne al cuadro la condición de viajero perenne.

Haiti: un clima poblado por una muchedumbre

por José Antonio Navarro Gisbert

La embestida de fuerzas naturales contra un espacio geográfico, situado en el trópico de Cáncer, 72° 25´ longitud oeste, 19° latitud norte, donde jamás cristalizó con carácter perdurable algo que pudiera merecer la calificación que los homologara con una nación donde se asentara un Estado, ha servido para exponer en carne viva una tragedia que se inscribirá en los anales del infortunio.

Las cuitas de nuestro hombre en Europa

por José Antonio Navarro Gisbert

Por lo que afecta a España, la Alianza de Civilizaciones con la que Rodríguez Zapatero pretende montar su pedestal en la historia, sustenta la voluntad de convertir una de las cinco naciones, base del proyecto cultural, religioso y político de la identidad europea, en un país no alineado. Despropósito sólo concebible cuando se pretende borrar el hecho de que España, junto con Inglaterra, Francia, Alemania e Italia, en los estertores de la Edad Media, fue motor de la Europa que en nuestros días se afana por vencer todas las inercias que se resisten, cada vez con menos fuerza, y sacudirse los lastres que hasta hace pocos años hacían de su espacio físico campo de batalla.

Estampas italianas entre lo sublime y lo grotesco

por José Antonio Navarro Gisbert

Van a celebrarse ahora 150 años del cumplimiento de la anhelada aspiración de Italia de acceder a su condición de Estado-nación, malograda por las vicisitudes que relegaron a la bota transalpina al tardío logro de su plenitud política. Fue tras la batalla de Solferino cuando Víctor Manuel II, rey del Piamonte, dirigiéndose a sus huestes proclamó la victoria con estas palabras: «Soldados, hoy hemos dado una lección a los austríacos.» Pero lo notable de esta arenga es que la hizo en francés, idioma habitual por aquel momento en el Piamonte, partero de la unificación de Italia. A pesar de su consolidación, en cierta forma fue un alumbramiento con fórceps.

Turquía: un conflicto que viene de lejos

por José Antonio Navarro Gisbert

Pese a sus indiscutibles deseos, compartidos tanto por Estados Unidos como por buena parte de las fuerzas liberales europeas, Turquía no consigue ver colmado su deseo de integrarse en la Unión Europea. Por lo demás, poco dice a favor de la aspiración turca el hecho de que un importante miembro de la OTAN manifieste su apoyo al régimen iraní de Ahmadineyad.