Escuchando lo que dicen los cuatro intervinientes en el programa de Intereconomía Televisión que reproducimos en esta página (José Javier Esparza, que conduce el programa; el teniente general del Ejército de Tierra César Muro; el famoso pintor Augusto Ferrer-Dalmau; y el no menos famoso periodista Kiko Méndez-Monasterio), es imposible no exclamar con un deje de nostalgia: ¡Aquellos españoles eran gentes de otra raza! Poco tenían que ver con los blandengues hombres de hoy.
Aquellos españoles... Los de los siglos de oro de los que aquí se habla, y muy en particular los soldados de los Tercios que participaron en lo que se conoce como “el milagro de Empel”, ese pueblo de Flandes donde el 8 de diciembre de 1585 la Virgen obró el milagro de facilitar su victoria. Ya se trate del milagro de una efectiva acción sobrenatural gracias a la cual quedaron congeladas las aguas que cercaban a nuestros soldados (tal parecen opinar los cuatro intervinientes); o ya se trate de un milagro metafórico o mitológico, como otros creemos que se debe considerar esa cosa tan misteriosa, tan grande: lo divino, lo sagrado.
Quienes también creían, y sin la menor duda, que se trataba de una intervención efectiva de la divinidad, eran los soldados de los Tercios. Lo creían ellos… y cuantos en aquellos tiempos vivían. ¡Afortunada creencia! Es ella la que posibilitaba, en últimas, que
Aquellas gentes estaban movidas por un aliento de lo sagrado que les hacía ser de otra raza: la de los grandes, la de los fuertes.
aquellas gentes estuvieran movidas por un aliento de lo sagrado que les hacía ser de otra raza: la de los grandes, la de los fuertes.
Qué más da que sus mitos no fueran vividos como los hermosos, como los poderosos mitos que son. Que más da que los vivieran como verdades incontrovertibles. Las de hoy, las que, sustituyendo a los grandes mitos de ayer, corren por calles y plazas, son, además de falsas, deleznables.
Este video
De ello —no de estas cuestiones, sino de la historia de aquellos heroicos antepasados nuestros, tan cercanos… y tan lejanos— es de lo que, en la festividad de la Inmaculada, patrona de España y del Arma de Infantería, se nos habla en este apasionante video.
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