Tampoco podemos obviar lo que parece comprobado: el trato denigratorio y en ocasiones violento que han sufrido algunos homosexuales en Rusia. La solidaridad con las personas injustamente tratadas es irrenunciable, sean cuales sean sus convicciones. Aunque, en este caso, el problema no es la legislación sino justamente la falta de rigor de esa legislación que debería proteger efectiva y eficientemente a todos.
¿Alguien dijo crisis? Porque la crisis de 2007 pasó por Occidente igual que tantas otras y cada país respondió como supo y pudo, según su capacidad, aguante y sentido del sacrificio. Al sur europeo (los desdichados PIGS de la UE), les tocó la peor parte, según lo previsto. Y a España la devolvió de golpe a su auténtica realidad económica, social y política. No estamos en crisis sino instalados con demasiada urgencia, aún perplejos, en la verdad de nuestro desnudo veraniego y playero: un desastre.
"El poder nace de la boca del fusil", decía Mao Zedong, y no mentía. Todos los regímenes políticos del planeta, democráticos o no, tienen como justificación fundacional un acto de violencia. Inglaterra es una monarquía parlamentaria porque Oliver Cromwell consiguió que le cortasen la cabeza a Carlos Estuardo. Los Estados Unidos de América nacieron en guerra contra el imperio británico y se consolidaron en la peor catarsis que conocen los pueblos: su guerra civil. De Francia para qué hablar; o de Alemania, Italia, Portugal, o países que nos resultan más remotos como Japón, China, Irán, Israel… En todas partes, bajo cualquier circunstancia histórica, el poder ha nacido de la boca del fusil.
¿Consejos para un escritor?... Pero ¿esto qué es? ¿De qué van ahora los de El Manifiesto? ¿Se han vuelto literatos los de El Manifiesto ("letraheridos", por decirlo con un hermoso catalanismo)? No, nos hemos vuelto en absoluto letraheridos. Ya lo éramos, pero no le dábamos bastante espacio. Un espacio que, en lo sucesivo, y de modo particular a partir del próximo curso, pretendemos darle con todas las de la ley. De momento, ahí van estos diez consejos dados por José Vicente Pascual.