¿Será usted el destinatario?
Vaya por delante que ésta no es una carta crítica, es un escrito de conciencia. Defiendo la economía productiva y lo que se ha dado en llamar la economía social de mercado, y creo que en España hay que hacer reformas estructurales profundas. También sé que un gobiernos de frívolos despilfarradores, mantenedor de cortesanos, como el que hemos tenido animan a cualquiera a evitar pagar el máximo de impuestos.
Cómo todo el mundo escribe y opina sobre este tema, he pensado que yo también podía poner mi granito de arena, quizás desde otra perspectiva. Europa está en crisis económica porque se ha colapsado. ¿Se ha colapsado la economía productiva? No. El problema radica en las dos perversiones que han llevado al sistema a bloquearse:
Hace unos días leía en "El Mundo", mi diario de referencia, una crónica en la que se informaba detalladamente de la supuesta censura de una película española sobre la guerra civil. ¡Otra, sí, otra! Y ¿cuál es, parece ser, el motivo? Pues no es otro que el hecho de que no ponen a caer de un burro a los del bando nacional. No se crean que es porque ensalza a los "nacionales", no, es simplemente porque no los pone a parir, y de alguna manera no ejerce el repetitivo maniqueísmo al que nos tiene acostumbrada la cinematografía guerra civilista, en la que los republicanos son los buenos y los nacionales los malos.