Cómo todo el mundo escribe y opina sobre este tema, he pensado que yo también podía poner mi granito de arena, quizás desde otra perspectiva. Europa está en crisis económica porque se ha colapsado. ¿Se ha colapsado la economía productiva? No. El problema radica en las dos perversiones que han llevado al sistema a bloquearse:
1. Somos una guardería social insostenible.
2. No se ha puesto coto, mediante leyes adecuadas, a la especulación financiera, la evasión fiscal, el despilfarro público y la economía sumergida.
Y, por tanto, como ya no somos los únicos en el mundo que crean productos de calidad, innovan o tienen mano de obra cualificada, hemos dejado de ser competitivos porque nuestros costes de fabricación, entre otras cosas, no se pueden sostener. Por tanto no hay ingresos y el estado del bienestar, ese que permite a un vago ser un vago retribuido, a unos padres que se desentiendan de la educación de sus hijos o a un jubilado pasarse las mañanas en la consulta del médico, como quien va a echar una partidita de dominó, amenaza con arrasar todo lo que se ponga por delante.
El barco se está hundiendo, y si no actuamos rápido y con determinación se hundirá del todo.
Las leyes para poner fin a las cuestiones económicas del punto dos deberían implantarse en toda la zona euro, eso supondría mucha más recaudación para el erario público. Al mismo tiempo deberían rebajarse impuestos directos, flexibilizar contrataciones y despidos, aumentar los impuestos indirectos sobre productos de lujo y rebajarlos sobre los de primera necesidad.
En cuanto a la guardería social (estado del bienestar), habría que reducirla drásticamente, entre otras cosas porque paraliza la sociedad, inhibe de la responsabilidad individual y tiene efecto llamada sobre la inmigración ilegal.
Las prestaciones del Estado deberían limitarse a las siguientes:
- Educación básica (hasta los 16 años)
- Medicina pública y de calidad (con copago simbólico para el 90% de la población)
- Prestaciones de desempleo (limitada a dos años y siempre y cuando no se rechace ninguna oferta)
- Pensiones de jubilación (proporcionales al tiempo trabajado)
A partir de esto, todos los servicios deberían ser públicos pero gestionados por empresas privadas, para eliminar o reducir pérdidas, y los usuarios de ellos abonarlos en función de sus rentas económicas. No es de recibo que el hijo de un millonario pague lo mismo por ir a una universidad pública que el hijo de un trabajador mil eurista.
Debería cambiarse el régimen de funcionariado permitiendo mayor flexibilidad en todos los sentidos y reducir y desburocratizar considerablemente la administración pública.
En cuanto a leyes sociales, hay que devolver a los individuos su responsabilidad, esta es una sociedad de ñoños pensantes que quedan paralizados ante cualquier problema, y tenemos muchos y graves, y ya no digamos a nivel de civilización, que estamos a punto de desaparecer. He aquí algunas propuestas:
- Ley que otorgue autoridad a los maestros y profesores sobre alumnos y padres.
- Ley que otorgue a los directores de escuela pública poder de contratación o despido.
- Desaparición de las AMPA (asociaciones de madres y padres, en realidad deberían llamarse ADPPC, asociación de adoradores de príncipes y princesas consentidos).
- Restricción de la ley de divorcio cuando haya hijos menores de catorce años, siendo un juez quien determine si ha lugar o no a tal decisión, prevaleciendo siempre, y por encima de todo, el interés de los niños.
- Restricción de la ley del aborto a casos muy concretos, los tres establecidos en la ley anterior.
- Prestación de un servicio social de seis meses a todos los ciudadanos, mujeres y hombres, al cumplir los 18 años.
- Responsabilidad civil o penal de los padres por los delitos cometidos por sus hijos menores.
- Obligación legal a todos los inmigrantes extra-comunitarios de aprender la lengua del país de acogida y los valores y leyes de este, mediante examen vinculante.
- Leyes severas sobre el consumo y tráfico de drogas.
- Leyes severas sobre el maltrato de género o el maltrato infantil. (Por severas entiendan severas, no lo que hay hoy).
Estas son algunas medidas, faltarían muchas más, pero hemos de ser conscientes de que nuestra sociedad debe cambiar, por mucho que los indignados se indignen o la izquierda se eche a la calle, no habrá más remedio que asumir una drástica reforma estructural que supondrá nuevos valores para la ciudadanía, probablemente mejores que los actuales. Eso, o la sovietización del sistema, que como es comprobable históricamente, tan buenos frutos ha dado allá donde se implantó.
Arremanguémonos porque hay trabajo y sobran prebendan, necesitamos coraje y determinación. En España preveo demasiada prudencia del gobernante y demasiados gritos callejeros. Espero y deseo que el gobernante que llega tenga una paciencia limitada, sino mal vamos a ir.
