Autor:

Aquilino Duque

De poesía, religión y espíritu crítico

Quince codazos: a propósito de un libro de Miguel D’Ors

por Aquilino Duque

AQUILINO DUQUE Quince codazos mal disimulados me asesta Miguel d’Ors en su delicioso libro Virutas de taller, (Ed. Los papeles del sitio, Valencina, Sevilla, 2007), el cuarto de los que con el logotipo (la empresa diría Saavedra Fajardo) de una pareja de pingüinos da a la estampa el poeta Abel Feu en Valencina de la Concepción. Los otros tres son, por orden de aparición, La superstición del divorcio de G.K. Chesterton, Puntos suspensivos de Mário Quintana y Escolios escogidos de Nicolás Gómez Dávila. Habría que agregar breves entregas de poetas contemporáneos, una bonita colección de haikus y un libro excepcional, por su calidad y por su género, a medias entre el relato, las memorias y la elegía: Las niñas del Altillo, de la jerezana Begoña García González-Gordon.

El desguace de la lengua española

España: burricie y xenofobia

por Aquilino Duque

AQUILINO DUQUE En El Ferrol del Caudillo, hoy Ferrol de Pablo Iglesias, fui invitado a hablar de una novela mía, cosa que hice ante un público de pensionistas inexpresivos, cuya frialdad atribuí al hecho de expresarme en castellano, y no en portugués macarrónico, como había hecho mi presentador. Como quiera que el sentido hispánico de la hospitalidad está por encima de las bajezas autonómicas, pude disfrutar de las delicias de una de mis cocinas españolas preferidas: la gallega. Y allí, al no haber atriles ni tarimas, sino mesa, mantel, platos y botellas, se impuso por su peso natural la prestigiosa lengua que nos une a los españoles todos.