Autor:

Antonio Martínez Belchí

Pero la cuestión no es esencialmente económica

¿Igualitarios nuestros tiempos? ¡Por favor!…

por Antonio Martínez

La desigualdad crece, ciertamente; pero diríamos que lo hace por motivos casi metafísicos, operantes en los estratos más profundos de la psique occidental contemporánea, de manera que la creciente desigualdad económica sólo sería un efecto más de un fenómeno de índole general.

¿Qué le queda a España?

por Antonio Martínez

Lo único que nos queda… es el diccionario. Hay que reencontrarse humildemente con el universo primigenio de las palabras y de las cosas. La locura, la desvergüenza política que hoy nos rodea tiene su raíz precisamente en el desprecio sofista y posmoderno de las palabras, borrachera de soberbia que nos ha llevado al desprecio de todo lo demás.