Debemos defender a España, no a la Constitución, una más de las muchas que hemos sufrido. Para que España viva, es preciso que este régimen muera. Y cuanto antes, mejor.
Esos momentos álgidos, cuando retumban los tambores, resuenan los clarines. Cuando salta, incandescente, la Historia, se abre el mundo y apunta el rostro vertiginoso de lo desconocido.
"¿Son para un partido de fútbol sus banderas? Es curioso, pero hay mucha gente que nos está comprando banderas estos días. ¿Juega la Roja?" "No, la Roja no —le contesté—. Pero los rojos sí juegan en Cataluña. Y si el Gobierno no detiene a unos cuantos sediciosos, el domingo van a ganar".