Sección:

Nación

La caza del elefante

Caza de brujas

por elmanifiesto.com

El pasado 14 de abril, coincidiendo con lo sucedido en una cierta cacería celebrada en el África negra, perdón, subsahariana, el periodista Salvador Sostres publicó en el periódico "El Mundo" un artículo titulado "El rey dispara": "mitad ternura, mitad sarcasmo —lo califica hoy—; mitad nostálgico de las grandes Casas Reales […] y mitad burlón por los últimos acontecimientos que han relacionado a los Borbones con las armas y en general con sus metidas de pata".

El poder y la corrupción

por Carlos Salas

Nada tan instructivo para un profesor de instituto, como leer a sus alumnos y en voz alta las noticias de la sección de Política de los medios de comunicación por estos días.

Odyssey: escondieron una parte del tesoro del barco español

por elmanifiesto.com

El 5 de octubre de 1804, en lo que se denominó Batalla del Cabo de Santa Maria y que se inició con un ataque inglés sin previa declaración de guerra, la fragata española Nuestra Señora de las Mercedes fuealcanzada en la Santabarbara, hundiéndose y pereciendo 249 españoles. Había sido botada en La Habana en 1786 y procedía de El Callao y Montevideo.

Y aún dicen que no odian lo español…

Los separatistas vascos contra el Siglo de Oro español

por elmanifiesto.com

Los consejos escolares de dos colegios públicos de Basauri han decidido dar un golpe de timón y romper con la denominación que les une al Siglo de Oro del arte español. Las escuelas Lope de Vega y Velázquez están inmersas en un proceso interno para sustituir sus nombres por topónimos. En el caso del primero, el consejo escolar solicita denominarse Bizkotxalde. En el segundo, apuestan por Solobarria. Ambos lugares, cercanos a donde se ubican.

Carta abierta a nuestra casta política

Ustedes tienen la culpa

por elmanifiesto.com

Innumerables Plataformas formadas por ciudadanos, respetuosamente nos hemos dirigido a ustedes para pedir, sugerir y proponer soluciones a una serie de problemas que arrastra nuestro sistema. Ustedes nunca nos han hecho caso ni se han interesado en nuestros planteamientos. Seguramente su soberbia les impide aceptar que ciudadanos de la calle, gente corriente, aunque plena de espíritu cívico, pudiese tener alguna idea provechosa para nuestro país digna de ser tomada en cuenta por ustedes, los privilegiados, la élite.