Extraño resulta encontrar denuncias parecidas en las publicaciones contemporáneas y menos en un periódico main-stream. Cuando ello sucede corresponde saludarlo calurosamente.
Todo el trayecto de Jünger se puede condensar en esta frase suya: “El orden humano se parece al cosmos en que, para renacer, es preciso que se sumerja de vez en cuando en el fuego”.
Si algo bueno tiene la “educación” woke es que los artistas más valorados son Rothko, Pollock y Mondrian, no los devaluados machirulos de Ticiano, Rubens o Rembrandt.