El apego de Sánchez a la presidencia y su ínfimo porcentaje de escaños le convierten en un rehén perfecto para legitimar una operación de troceo del Estado.
Poesía y psicología caminan unidas en el certero y tremendo retrato de cada uno de los héroes trágicos, que llevan la tragedia dentro de sí por ser grandes y vulnerables a un tiempo.
Una señora de 60 años no puede tener hijos —mellizos—, por el método de inseminación artificial, practicado nada menos que en Estados Unidos. No está bien considerada tanta insolencia.