Hace ya tiempo que se ha cegado entre nosotros el flujo de informaciones sobre la guerra de Ucrania. Pero hoy, por fin, no les queda más remedio que anunciar que Rusia está venciendo.
Lo que se narra de Alemania también se puede aplicar a esta Europa que padecemos, dividida entre terminales naciones sin soberanía y un “pseudo-supraestado” sin independencia, mero brazo mercantil de la OTAN.
10.º aniversario del golpe de Maidán. O el bufón que pronto será calavera