Creativo no es quien acumula potencialidades —con el lenguaje de hoy: quien rebosa talento—, sino quien da a luz algo que el mundo nunca ha visto. Crear es un acto de gracia.
En los países democráticos, explica Michel Onfray, se ha establecido una nueva dictadura destinada a destruir la libertad, empobrecer la lengua, abolir la verdad, suprimir la historia para reescribirla a voluntad, negar la naturaleza y propagar el odio.
La nación que dio tres emperadores a Roma, que alumbró a Séneca, Lucano, Marcial, Quintiliano e Isidoro de Sevilla desdeña el latín hasta amenazar su continuidad.