La Open Society Foundation (OSF) de Soros se ve obligada a someterse a su segunda reestructuración en sólo tres años. Esto significa que el grupo de extrema izquierda recortará su personal global a más de la mitad.
La junta directiva de la organización globalista había decidido durante el pasado verano despedir personal y cerrar oficinas en todo el mundo, según correos electrónicos filtrados y obtenidos por Bloomberg.
“Con la decisión de la junta, en junio, de recortar el personal en más del 40%, debe disminuir necesariamente tanto el tamaño de nuestra plantilla como el de nuestra huella”, declaró el vicepresidente de programas de la Open Society Foundation, Binaifer Nowrojee, en uno de los correos electrónicos vistos por Bloomberg.
"Ya no tenemos el ancho de banda para operar con varias oficinas pequeñas y, por lo tanto, tomamos la decisión de reducir aún más nuestras ubicaciones", advirtió Nowrojee.
Ello significa que la organización, que en 2021 empleaba a casi 1.700 personas, después de los últimos recortes quedará reducida a menos de 500 personas.
Bloomberg enumeró seis oficinas de la OSF en África que se quedarían sin empleados y cerrarían a finales de año.
Este mismo medio señala que Inside Philanthropy había informado que “más de una docena de oficinas en África y Asia” habían sido eliminadas de una lista en el sitio web de la organización.
En julio, Inside Philanthropy informó de que la OSF despediría “al menos al 40 por ciento de su personal”.
También se estaban cerrando oficinas en Barcelona y Baltimore, informó Bloomberg.
En un correo electrónico, el director ejecutivo de África, Muthoni Wanyeki, declaró al personal: “Lamento mucho que todo haya resultado así […]. Obviamente no es lo que ninguno de nosotros esperábamos y también lamento mucho no haber tenido la información sobre esto antes".
En lo que pudo haber sido una nota amarga, Wanyeki señaló que los recortes iban en contra de lo que el liderazgo de la organización se había "comprometido hace dos años".
Según informó Bloomberr, la OSF ha ofrecido subvenciones por más de mil millones de dólares cada año, cerca del 10 por ciento de cuya suma se ha destinado a África.
En una entrevista, el presidente de la OSF, Mark Malloch-Brown, declaró el mes pasado que muchos de los recortes tenían que ver con un mayor enfoque en la evaluación de los impactos que tienen las subvenciones de la Fundación de Soros.
Declaró también que “un enorme proceso burocrático precedió a la subvención y luego fue mucho más ligero”. Actualmente "estamos revirtiendo ese equilibrio", concluyó.
Sin embargo, a pesar de los recortes globales, la OSF afirmó que no se esperaba que se realizaran cambios en los programas en Estados Unidos hasta después de las decisivas elecciones presidenciales de 2024.
En agosto, la organización ya había anunciado que “suprimiría en gran medida la financiación dentro de la Unión Europea, y la financiación adicional sería extremadamente limitada”, informó Bloomberg.
Sin embargo, el hijo de George Soros, Alex Soros, quien fue nombrado sucesor de su padre en junio, cuestionó la anterior idea.
"Es una novedad para mí que la OSF abandone Europa", declaró en una conferencia en agosto en Austria. "Varios medios informaron de que ése es el caso, pero simplemente estamos cambiando nuestra estrategia".
Posteriormente reiteró esa posición en un artículo de opinión de Político fechado el pasado 31 de agosto:
"A medida que OSF reestructura su forma de trabajar a nivel mundial, estamos cambiando nuestras prioridades en Europa en consecuencia", escribió, para añadir seguidamente: “Sí, esto significa que abandonaremos algunas áreas de trabajo para centrarnos en los desafíos de hoy, así como en los que enfrentaremos mañana.
“Y sí, también reduciremos significativamente nuestra plantilla, con el fin de garantizar que más dinero llegue a donde más se necesita.
"Pero esto no es ningún tipo de retirada."
Soros jamás leería semejante revista.
¡Pero usted sí!
