Cartel del Coloquio de 2015 del Institut Iliade, dedicado a la defensa del arte y de la belleza

El Instituto Iliade: por la defensa del espíritu europeo

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El 20 de junio de 2014, en el Solsticio de verano y en lo alto del monte Olimpo, quedaba simbólicamente fundado el Institut Iliade.

Lo hacían, junto con un grupo de otros amigos, los intelectuales franceses Philippe Conrad, Jean-Yves Le Gallou y Bernard Lugan.

 Cumplían de tal modo los deseos expresados por Dominique Venner cuando el 23 de mayo de 2013 se inmoló ante el altar mayor de Notre-Dame, «con el fin —dejó escrito— de despertar las conciencias adormecidas. Me sublevo contra los venenos del alma y contra los deseos individuales que, invadiéndolo todo, destruyen nuestros anclajes identitarios y especialmente la familia, base íntima de nuestra civilización multimilenaria. Al tiempo que defiendo la identidad de todos los pueblos en su propia patria, me sublevo también contra el crimen encaminado a remplazar nuestras poblaciones». (Enlace aquí.)

Desde entonces, el Institut Iliade ha seguido desarrollando sus actividades. Además de la amplísima información cultural y metapolítica incluida en su excelente página web y además de la edición de libros en colaboración con otras editoriales, la batalla cultural emprendida por el Iliade se centran en dos campos fundamentales.

Por un lado, la celebración de un coloquio que reúne cada año en París en torno a mil asistentes, todos los cuales abonan su correspondiente entrada. Por otro lado, la realización de un amplio número de cursos destinados a la formación política y cultural.

Limitadas hasta ahora su batalla cultural al ámbito francés, el Iliade, fiel a su vocación europea, se propone extenderla al conjunto de nuestra gran patria europea.

Con tal fin ha lanzado el siguiente video en los principales idiomas , incluido por supuesto el nuestro.

Sería interesante, ¿verdad?, que también en España existiera algo parecido. Interesante, no: necesario, indispensable es lo que sería. Pero para ello hace falta aunar voluntades, esfuerzos, trabajo... Mucho trabajo. También recursos económicos, por supuesto. Con sólo buenos deseos, por mejores que sean, no se va desde luego a ningún sitio.

Si, entre nuestros lectores, alguien está dispuesto a comprometerse activamente en ello, este correo (explicando sus posibilidades, ganas, perfil, edad y ubicación) está a su disposición: redaccion@elmanifiesto.com.

 

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