Nuevo libro de José A. Navarro sobre la Guerra Civil
El misterio de la victoria de Franco
28 de noviembre de 2009
La izquierda española preparaba la conquista del poder por medios violentos desde que perdió las elecciones de 1933. La Revolución de Octubre fue el primer paso. Y las elecciones de 1936, decretadas por el inepto Niceto Alcalá Zamora, el siguiente. El asesinato del prestigioso diputado José Calvo Sotelo por un comando terrorista formado por policías y escoltas del socialista Indalecio Prieto decidió a toda la derecha a unirse a la conspiración encabezada por el general Emilio Mola. El golpe de Estado fue un fracaso. Entonces, ¿por qué los rebeldes fueron capaces de construir un Estado, emitir moneda y ganar casi todas las batallas?
El 20 de julio de 1936, los sublevados contra el Frente Popular habían fracasado. En Madrid, Barcelona, Valencia, Bilbao y Málaga las tropas leales y los milicianos habían vencido a los rebeldes. Al Ejército de África mandado por el general Franco le faltaban buques de transporte en los que cruzar a la Península. Mola carecía de municiones y tenía que dividir sus fuerzas entre el frente de Guipúzcoa y los puertos de la sierra de Madrid. El general Queipo de Llano se mantenía con apuros en Sevilla… El Gobierno de la República tenía bajo su poder los principales centros industriales, las reservas de oro del Banco de España, la mayor parte de la Armada y de la Aviación, las regiones más fértiles y el reconocimiento internacional. Parecía que era cuestión de horas que los rebeldes se rindiesen o huyesen al extranjero.
Sin embargo, a partir de finales de julio, la República empezó a perder una batalla tras otra: el Ejército de África cruzó a la Península, Queipo de Llano y Franco tomaron Huelva y Badajoz y en Extremadura unieron su zona con la controlada por Mola (Castilla la Vieja, Galicia y Navarra), las ciudades sitiadas de Oviedo, Granada y Huesca no cayeron, el Alcázar no se rindió… En los tres años siguientes de guerra, el Ejército Rojo fue incapaz de conquistar una sola capital de provincia, salvo Teruel, que perdió unas semanas después. Y en marzo de 1939, un golpe de Estado dirigido por militares, socialistas y anarquistas contra el Gobierno de Negrín y los comunistas concluye la guerra.
¿Por qué venció Franco? es una pregunta de interés para todos los aficionados a la historia española, y también el título de este libro. José Antonio Navarro, autor de otros libros sobre los convulsos años treinta, analiza las respuestas a partir de las memorias y los escritos de varios de sus protagonistas, todos del bando republicano: los militares Segismundo Casado y Vicente Rojo, Manuel Azaña, los socialistas Indalecio Prieto, Francisco Largo Caballero y Juan Negrín… Queda claro que la victoria de Franco no se debió ni a los moros, ni a la Legión Condor.
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