Ha nevado toda la noche. He aquí mi mañana:
08:00 : Hago un muñeco de nieve.
08:10 : Una feminista pasa y me pregunta por qué no hago también una muñeca de nieve.
08:15 : Entonces hago también una muñeca de nieve.
08:17 : La canguro de los vecinos protesta porque le parece que el busto de la muñeca es demasiado voluptuoso.
08:20 : La pareja gay del barrio se queja porque, según ellos, debí haber hecho dos muñecos de nieve.
08:25 : Los vegetarianos del Nº 12 se quejan por la zanahoria que al muñeco le hace de nariz: las verduras son comida y no deberían usarse para eso.
08:28 : Me tratan de racista porque la pareja de muñecos es blanca.
08:31 : Los musulmanes de la acera de enfrente quieren que le ponga un pañuelo sobre la cabeza a la muñeca.
08:40 : Alguien llama a la policía, que envía una patrulla a ver qué pasa.
08:42 : Me dicen que debo quitar el palo de escoba que sostiene el muñeco, pues podría usarse como arma mortal. Las cosas empeoran cuando gruño: “Sí, sobre todo si lo tenéis metido en el c***”.
08:45 : Viene el equipo de TV local. Me preguntan si sé la diferencia entre un muñeco de nieve y una muñeca de nieve. Respondo: “Sí, las bolas”, y me llaman “sexista”.
08:52 : Mi teléfono móvil es requisado,controlado y me llevan detenido a comisaría.
09:00: En el telediario dicen que se sospecha que soy un terrorista dedicado a aprovechar el mal tiempo para provocar desórdenes públicos.
09:10 : Me preguntan si tengo cómplices.
09:29 : Un grupo yijadista desconocido reivindica la acción.
Moraleja: esta historia no tiene moraleja ,sólo es la Europa en la que vivimos hoy en día.