¿Le asusta ver la factura de su teléfono móvil –y el de su cónyuge, y los de sus hijos–? ¿Cree que paga demasiado? Está circulando por Internet –¿por dónde iba a ser?– una protesta para obligar a las empresas de telefonía a bajar sus precios. ¿En qué consiste? En apagar su teléfono los días 1 y 2 de noviembre. No le costará nada y podrá ganar mucho. Ahora bien, ¿puede prescindir del aparatito durante dos días o está encadenado a él?
¿No se dice en el mundo del marketing y de la gestión empresarial que el cliente siempre tiene razón? ¡Pues demostrémoslo! En Estados Unidos una compañía de móviles ofrece a sus clientes 2.000 minutos por sólo 75 dólares Si alguien consumiera esa cantidad en una telefonía española, tendría que pagar una factura de alrededor de 3.000 euros.
¿Cómo consiguieron los norteamericanos este beneficio? Mediante la unidad. Y sin hacer huelgas, ni rompiendo o quemando nada. Sólo de una manera: no usando el móvil durante cinco días seguidos. Las empresas se encontraron ante la disyuntiva de bajar las tarifas o quebrar. Un paro de los usuarios no les arruinará, pero obligará a sus directivos en pensar en abaratar sus servicios.
La propuesta es muy simple:
APAGAR LOS TELÉFONOS LOS DÍAS 1 Y 2, LOS PRÓXIMOS DOMINGO Y LUNES.
¿Cree que es inútil? Pues no lo es. En 1999 en los ciudadanos obligaron a TELECOM y a MOVISTAR a poner una tarifa reducida a Internet por el medio de descolgar los teléfonos durante 15 minutos. En Estados Unidos lograron que las compañías proveedoras de Internet absorbieran el costo de la llamada, como comunicarse a un 0800 en vez de a un 0610.
Y si necesitan el teléfono por negocios eviten todas las llamadas que puedan.
Cuantos más seamos, más fuerza tendremos y más importante será nuestra propuesta. Por eso, pedimos que corra la voz por todo el país.
Queremos las llamadas más baratas. Luchemos por que nos den 10 mensajes de texto a 0.10 céntimos.
No es imposible lograrlo. Sólo apaga tu móvil el 1 y 2 de noviembre, y si no lo quieres apagar por lo menos no contestes mensajes ni llamadas.
