IGNACIO SANTA MARÍA
Esta actitud crítica del diario de Prisa dirigida a la figura de Zapatero se inició ya al final de la tregua de ETA, justo después del atentado de la T-4, y se ha hecho patente a propósito del reciente anuncio de las ayudas al alquiler para jóvenes. El hecho de que este rotativo critique tan abiertamente la acción de un presidente socialista es verdaderamente inédito y, tratándose del Grupo Prisa, sólo puede obedecer a una reacción defensiva porque ve amenazado su órgano más vital: los intereses comerciales. Verse atacado precisamente en la joya de la corona de su negocio: la explotación de los derechos de emisión del fútbol.
Según la tesis de El País, expuesta el pasado sábado en un amplio reportaje, fue el propio Zapatero quien, a través del ex secretario de Comunicación Miguel Barroso, impulsó la entrada en el mercado televisivo de La Sexta y de Mediapro, que han provocado un auténtico terremoto en el mercado de los derechos audiovisuales deportivos, arrebatando la hegemonía del Grupo Prisa en este ámbito.
El diario que dirige Javier Moreno va más allá y da por bueno un rumor según el cual Zapatero veía con buenos ojos la aparición de un diario “más a la izquierda” (sic) de El País, en referencia a El Público, la nueva cabecera que está a punto de lanzar el conglomerado empresarial de Mediapro y La Sexta.
La SER, en la reserva
Por el momento, la batalla abierta contra Zapatero sólo la está librando el diario El País, que con 430.000 ejemplares de difusión media diaria se puede permitir este lujo. Pero no le están secundando otros medios más masivos de Prisa, como la Cadena Ser. Aunque si la guerra se sigue enconando, todo es posible. Si son ciertas las revelaciones de El País, cabría plantearse dos hipótesis:
- Una, que Zapatero es un frívolo, que al igual que ha jugado con el futuro de grandes compañías, como la eléctrica Endesa, también disfruta jugando en el tablero de los medios de comunicación, menospreciando así el riesgo de perder el apoyo del gran aliado mediático del PSOE que ha sido siempre el Grupo Prisa.
- Dos, que el líder socialista da por segura su reelección al frente del Gobierno y su ambición le lleva a querer consolidar un nuevo grupo mediático más adicto aún a su figura, aún sin romper del todo el idilio Prisa-PSOE. Este nuevo grupo podría serle de gran utilidad en caso de conflictos internos con otros sectores del propio partido.
Como siempre, Zapatero, en este culebrón, vuelve a ser una fuente de incertidumbres y perplejidades.
