Del Alcázar madrileño en el que vivieron los reyes de España hasta el siglo XVIII se decía que “el Palacio de Su Majestad Católica es la alta escuela, de la puntualidad y de la devoción y cortesía”. El protocolo de la corte española, solemne, pesado y señorial, fue introducido por el emperador Carlos V en 1548 trasladando el que aplicaba la Casa de Borgoña. Desde entonces, todos los actos del día y de la noche se desarrollaron de acuerdo con unas normas imperturbables.
Los reyes eran como un reflejo de la divinidad, pero como dice el historiador alemán Ludwig Pfandl, en el capítulo de su biografía de Felipe II que dedica a este asunto, el protocolo borgoñón “también les grava la vida y les obliga a una servidumbre que viene a ser como un sangriento escarnio de sus otros privilegios”. Para moverse por su palacio, el rey necesitará del concurso de numerosas de personas, incluso cuando vaya por la noche a las habitaciones de la reina.
- ¿Cómo se organizaban las comidas de los reyes y príncipes? En el servicio al rey intervenían no menos de veinte personas, desde el clérigo que bendecía la mesa a los alabarderos que escoltaban los platos y los distintos aristócratas para los que era un honor entregar la servilleta o doblar el mantel. Durante la comida el silencio era absoluto; todos se entendían con suaves gestos.
- ¿Sabía que el pueblo podía entrar en los palacios a ver a la familia real almorzando? Era parte del protocolo para mostrar la majestad del rey. Una línea de guardias separaba a la gente del rey y sus servidores.
- ¿Quiénes formaban la guardia de corps de los reyes? Había tres unidades: los monteros de Espinosa (Burgos), cuyo origen viene de la Edad Media, los alemanes y los flamencos.
- ¿Qué requisitos se necesitaba para ser miembro de esos cuerpos de guardia? Fe católica, linaje, buenos antecedentes, limpieza de sangre y experiencia militar eran los principales. Las precauciones debían de ser muchas porque otros reyes europeos fueron asesinados por sus escoltas.
- ¿Cuántas llaves había de las puertas interiores del Alcázar de Madrid? Había tres. Una de esas llaves la tenía el propio rey, pero no podía usarla porque su dignidad se lo impedía. Las otras doslas tenía el aposentador de Palacio; éste entregaba una al camarero mayor. El aposentador acompañaba al rey en sus desplazamientos por el alcázar abriendo y cerrando las puertas a su paso.
- ¿Cuándo se empezó a dar a los reyes de España el tratamiento de Majestad? En la Edad se les llamaba Señor. Los Reyes Católicos recibieron el tratamiento de Altezas. El de Carlos V como emperador era Majestad y, por razón del protocolo borgoñón, éste empezó a aplicarse a su hijo.
- ¿Sabía que el rey y la reina dormían en habitaciones separadas? Y cuando el rey deseaba estar con la reina, se movía acompañado por sus monteros y otros cargos, con lo que no había ni secreto ni intimidad.
- ¿Por qué se llevaba el pan en una caja de metal cerrada y el vinagre se usaba bajo atenta vigilancia? Para evitar envenenamientos. El vinagre disimula el sabor de muchos venenos mezclados en las salsas. Una de las misiones de los sumilleres era vigilar la elaboración de las comidas para el rey: para mantener su calidad, su higiene… y su vida.
- ¿Quiénes podían cubrirse la cabeza ante el rey? Los grandes de España, los obispos y cardenales, los generales de las órdenes religiosas, los embajadores, los caballeros de las órdenes militares y del Toisón y los miembros del Consejo.
- ¿Cuántas habitaciones había que atravesar para llegar hasta el rey? Había una sala, una saleta, una antecámara, una antecamarilla y el gabinete de trabajo. Ante cada puerta había una pareja de guardias de corps o de ujieres.
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