G.V.
Mark Rothko, el principal exponente del expresionismo abstracto estadounidense de la segunda mitad del siglo XX, ha sido noticia. Su cuadro “Centro Blanco (Amarillo, Rosa y Lavanda sobre Rosa)”, subastado por la firma Sotheby’s, ha alcanzado la histórica y desorbitada cifra de 54 millones de euros, la mayor cantidad que se ha pagado hasta ahora en subasta por una obra contemporánea. El récord, que lo ostentaba un cuadro del también expresionista Willem de Kooning, ha pasado de 20 millones de euros a 54, nada más y nada menos que 34 millones de diferencia.
El magnate Rockefeller, que ha alcanzado ya los 91 años de edad, lo compró por 6.000 euros en 1960 y hasta el momento adornaba una de las paredes de su oficina del céntrico Rockefeller Center de Manhattan. El valor del mismo, estimado en 29 millones, fue rebasado por varios millones por un postor anónimo, quién ofreció los 54 millones de euros vía telefónica. Se crean así dos récords, para el artista y para la historia del arte posterior a
Tobías Meyer, el presidente del departamento de arte contemporáneo de Sotheby’s y que estuvo conduciendo el remate de la operación, ha declarado que “cada gran artista tiene una obra por la que es reconocido, y en el caso de Rothko, es ésta”. Además el cuadro tenía mucho interés por las pocas manos por las que había pasado: Rockefeller la adquirió en una galería a la que había sido consignada por Elizabeth Bliss Parkinson, quien la obtuvo directamente del pintor estadounidense.
Otros récords de la subasta
Esta ha sido la subasta de los récords, puesto que Francis Bacon y Jean Michel Basquiat han batido los suyos propios. La mayor cantidad que se había pagado hasta el momento por una obra de Bacon fue de 20 millones de euros. Hoy ha rebasado esta cifra, y ha llegado a los 39 millones con su Estudio del Papa Inocencio X (1962), inspirada en el retrato del Papa realizado por nuestro pintor Diego Velázquez en 1650. La obra, que provenía de una colección privada en la que estuvo durante 30 años, representa, según Meyer, “la mejor imagen del Papa de la serie realizada por Bacon. En ella, finalmente, se atreve a afrontar su inspiración artística, Velázquez. Es intensa, luminosa, radiante”.
También el polémico Basquiat, el pintor de grafittis que murió debido a una sobredosis de droga, ha alcanzado los 11 millones de euros con un autorretrato que realizó en 1981. En el catálogo de la subasta se apuntaba al Museo de Israel como su propietario y decía de la obra que era “la más deseable e importante de Basquiat en salir a subasta en muchos años”. En total se han vendido 254,8 millones de dólares en arte esta jornada.
Otras marcas importantes las ostentan Picasso, que tiene varias entre las diez que superan los 45 millones de dólares, Van Gogh, Cézanne, Renoir, el principal exponente del action painting Jackson Pollock o Gustav Klimt. Por la obra de Pollock, que ostenta el primer puesto en la obra más cara de la historia, un comprador financiero pagó en una transacción privada 140 millones de dólares.