Aforismos del calor (y III)

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Noúmeno



* ¿Preguntas qué tal va la vida? La vida, imparable, exultante, eterna. La cuestión es preguntarse por los vivientes.


* Amamos la vida, pero aborrecemos ser vivientes.


* La muerte nos regresa al ser y redime la condición transitoria de quien vive.


* Ser y conciencia, dos protocolos que se aborrecen en la individualidad.


* Si lo real antecede al ser (Zubiri), la conciencia debería anteceder al individuo.


* Retórica:

¿Y el efecto, puede anteceder a la causa?


Explicar los orígenes es imposible, y el empeño suele acabar en los territorios de lo mágico-religioso. Conjeturar sobre lo in-probable es más atractivo si imaginamos todo origen como una causa posmediata, aún no existente.

Desde esta perspectiva, tan aventurada como otra cualquiera, Dios (todos los dioses), es un inmenso proyecto humano. En construcción.


*Tomar decisiones es una necesidad y una capacidad de la conciencia. El ser en absoluta libertad y dominio debería sentir la capacidad pero no el acucio necesario sobre la decisión.


*Ser y la forma de estar parece decisivo. No sé cómo se las arreglan los idiomas, y los hablantes, que no integran en su vocabulario el verbo estar. Ser siempre en lo extenso, sin la precisión minutada del estar, conjetura un argumento inverosímil para la existencia.


*La realidad predecesora, no manifestada, es la única que interesa a los poetas y a los dementes, sometidos al conocimiento inaplicado, estéril y, de suyo, inviable.

*Sí existe un territorio, constatable, entre la cosa en sí y su manifestación sensible, y a quienes viven instalados en tal reino se les conoce por su nombre verdadero: dementes.


*La mayor demencia ingeniada por los cuerdos: vida eterna.


*Si bien, hay una forma de inmortalidad: amar a quien, para ti, es inmortal.


*La conciencia, el exceso absoluto del ser. Lo determina todo y no sirve para nada.


*La naturaleza sin conciencia establecería el ser en su puridad, causa y efecto de sí mismo. La conciencia obliga al ser a explicarse, haciéndole perder su sentido.


*Contradicción/Refutación de la conciencia: No parece tan necesario explicar el ser sino hallar el sentido cabal, primero y último de la conciencia.


*Si existe un principio causa del ser, la conciencia es debitaria, parasitaria, impura. Si no lo hay, la conciencia resulta un exceso, un derroche de lo absurdo en pos de nada.


*Conciencia y su consecuencia: pérdida del no-saber original que es inocencia. Paraíso. Es la primera y en realidad única escisión importante en la Historia de la humanidad.


*La conciencia es al ser lo que la habilidad para montar en bicicleta a un chimpancé. Como atributo, inútil; como espectáculo, cuestionable.


*Cuando, tras amarnos furiosamente, le pregunté qué tal le había ido, me respondió:

-Yo no he venido aquí para hablar de mi vida íntima.


*Nació y murió, y lo declararon sabio efímero, pragmático por antonomasia.


*Se sabía fruto del amor de sus padres, y por ese motivo y no otro, el tabú del incesto, jamás fue capaz de enamorarse.


*Amor y nacimiento, amar y morir... las únicas novedades de la existencia.

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