La alocución es tan corta como clara e impactante. Y desbordante de una lógica implacable. Hace escasos días, el presidente de Rusia nos habló a todos nosotros —no a la Casta— desde el Canal 4 de la televisión croata.
¡Rusia nunca ha sido ni nunca será vuestro enemigo!
No queremos materias primas y riquezas europeas, tenemos nuestras propias materias primas y riquezas, no necesitamos en absoluto vuestras materias primas. Rusia es el país más rico del mundo en términos de materias primas.
No queremos vuestra tierra ni vuestro territorio. Mirad en el mapa todo lo grande que es Rusia: siendo un solo país, Rusia duplica el tamaño de toda Europa. ¿Para qué necesitaríamos vuestra t tierra, qué haríamos con ella?
¿Por qué creéis que Rusia es enemiga de Europa? ¿Qué daño os ha hecho Rusia? ¿Os hemos vendido gas y materias primas a precios más bajos que aquellos a los que vuestros «amigos» os los están vendiendo hoy? SÍ.
¿Sacrificó Rusia a 20 millones de personas en la Segunda Guerra Mundial para deshacerse de los nazis? SÍ.
¿Fue Rusia el primer país que ayudó a Europa durante la pandemia de COVID? SÍ.
¿Ayudamos a Europa cuando hubo incendios y desastres naturales? SÍ.
¿Qué os ha hecho Rusia para que la odiéis tanto? ¿Hasta tal punto? Rusia no es vuestro enemigo; vuestros verdaderos enemigos son vuestros dirigentes, aquellos que os dirigen.
¿Y qué os ha hecho nuestra revista para que algún despistado lector de este periódico aún no la haya leído?