No, ni el pobre Nietzsche ni se lo llegó a imaginar. En sus tiempos, aún no había llegado tan lejos la cretinización de las masas, la degeneración de lo que él llamaba «el último hombre». Pero ahora sí ha llegado. Como nos ha llegado de China la última moda que arrasa este verano: el chupete para adultos. ¿Adultos?… Adultos-niños (con perdón de los niños), adultos descerebrados cuya infantilización en todos los ámbitos se traduce, como no puede ser de otra manera, en el apéndice bucal que les ha dado por ponerse.
Una muleta en la boca
La información nos la da en Francia el canal televisivo TF1, en la sección «Salud», encima. ¿El título? «Chupetes para adultos: el pequeño objeto reservado a los bebés se convierte en un parche emocional de moda». La práctica de meterse el chupete en la boca comenzó hace unos meses. «En las redes sociales, muchos usuarios se muestran con sus chupetes gigantes alabando sus beneficios para calmar el estrés, la ansiedad y facilitar el sueño». » Y TF1 nos explica con aire docto que chupar hace bien. «La succión, un medio natural [sic] de apaciguamiento», escribe la periodista, que seguramente tuvo que chupar su chupete durante las clases de gramática.
Pequeño chupador, pequeño beneficio; gran chupador, gran beneficio: para los chupadores de chupetes gigantes, esta práctica «aporta una sensación de serenidad», ya que la succión es un «reflejo que no es exclusivo de los bebés». Avanzamos. Por otra parte, Laurence Roche, científica de servicio, es categórica: la succión «no sólo tiene como objetivo la alimentación física para el desarrollo corporal y fisiológico del niño. Aporta una sensación de consuelo y seguridad. » En resumen, succionemos todos y el mundo será mejor. ¡Una ronda de chupetes en el avión que lleva a Zelensky y sus amigos a Estados Unidos, y la paz estará asegurada!
Cuidado: chupar puede convertirse en una adicción
Sin embargo, hay que tener cuidado, porque chupar puede convertirse en una adicción. Los profesionales de la medicina están preocupados: «Esta tendencia refleja un malestar, incluso una infantilización del adulto». Puede ser, pero no es seguro… Ahí es donde vemos la importancia de diez años de estudios. Se consulta a otra eminencia en psicología, el Dr. Tayeb Hamdi. Según él, el chupete se impuso durante los confinamientos. Seguramente se vendía a escondidas para calmar al cliente que ya no sabía si debía tomarse el café sentado o de pie.
En esta época de guerra total contra el virus traicionero, los pequeños no han crecido —algunos nunca han salido de casa— y los mayores han retrocedido. Por desgracia, «esta regresión, que debía ser temporal, se ha instalado en algunos casos de forma duradera, revelando una necesidad emocional insatisfecha». Desde entonces, el chupete se ha impuesto como un medio para «afrontar una realidad percibida como inestable, angustiante y difícil de afrontar».
La única pega es la salud bucodental. Los dentistas están preocupados: el chupete puede dañar los dientes, «provocar lesiones en el paladar y tensiones en la mandíbula». Sobre todo, «la succión repetida también puede provocar dolores en la zona cervical». Se avecina un nuevo frente para la Seguridad Social…
Después del pangolín y los murciélagos, el chupete
Según TFI Santé, la moda del chupete para adultos nos llega desde China a través de TikTok. Es posible, ya que la red social es utilizada por el Partido Comunista Chino como arma de destrucción masiva contra el decadente Occidente.
A finales de 2022, mientras el rumor se extendía con insistencia, Le Figaro titulaba: «Cómo China protege a sus hijos y nos vuelve idiotas a los nuestros con la red social TikTok». Y explicaba: «Las diferencias entre la versión china e internacional de TikTok plantean una pregunta: la del embrutecimiento de la juventud por un soft power extranjero.» El pasado mes de febrero, la red TikTok contaba con 1.590 millones de usuarios activos al mes en todo el mundo, en su mayoría adolescentes, y, si bien nuestras élites se han preocupado por los efectos de las diversas redes sociales en nuestras urnas y en la democracia amenazada, se han olvidado de preocuparse por el hecho de que también pueden fabricar generaciones de cretinos. La prueba está en el chupete.
¿Quieres saber más? Lanzada por Kim Kardashian, la tetina con la marca Dior o Vuitton, adornada con pedrería, se convertirá en un accesorio de moda. Los gigantes chinos Temu y Shein se encargarán de la fabricación, e incluso de los eslóganes para la próxima revolución: «¡Tetina para todos!», «¡Libertad, igualdad, succión!».
© Boulevard Voltaire
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